Ya había subido el repecho tres veces, ya conocía la inclinación elevada que cansa las piernas del más entrenado. Lo que no me esperaba fue el viento en contra que hizo que la tarea fuera más pesada aún. Lejos estuve de mi mejor tiempo, el del 2008 cuando puse 54 minutos y monedas, pero para no sentirme tan mal debo festejar que fue mi segundo mejor tiempo en este circuito.
Luego de este arranque autobiográfico pasemos a lo que importa, nuevamente la vorágine de las carreras montevideanas se devoró la hermosa convivencia que vivimos en Mercedes, el desencuentro parece la costumbre para las carreras de acá a la vuelta. Tenía pensado llegar con tiempo para inscribirme a la media maratón, pero una serie de inconvenientes y el no conocer la terminal del cerro, hicieron que llegara faltando 15 minutos antes de la largada. Hecha la inscripción para la corré Montevideo, me dirigí hasta el liceo donde se encontraba el grueso del equipo (los que están en la foto).
Párrafo aparte para la foto, creo que es más fácil que el líder norcoreano Kin Jong-un le mande un sms a Barack Obama desde su Samsung Galaxy 4 diciéndole que no se tomara en serio lo de los misiles que era una apuesta que tenía con su amigo iraní, que logremos sacarnos una foto con la totalidad de los integrantes del equipo antes de fin de año. Deberíamos poner un punto de encuentro y fijar la foto con anticipación, por ejemplo, 15 minutos antes de la largada (puse 15 minutos ya que antes seguro no llego).
Algunos mantuvieron sus tiempos, otros los bajaron y otros los subimos, algunos estrenaron el circuito, algunos lo corrieron varias veces, algunos caminaron, alguno sacó fotos, en realidad, tengo alguna idea de quienes fueron, pero como no tengo la certeza ya que tuve que partir raudamente en la camioneta de Don Baccarezza no quiero dar nombres para no caer en errores, errores que por otra parte me recalcan cuando omito alguno en la lista de resultados.
Los que corrieron: Noelia, Jimena, Elisa, Silvina, Lili, Santiago, Enzo, Miguel, El Capi, Juan, Jorge, Pablo, Schubert, Pipo, Luis, Gustavo y yo.
Los que acompañaron: Matías, Doña y Don Baccarezza, con sus nietas Camila y Victoria.
Ahora, mediante el sistema random (gracias goma de mascar por la idea) pueden unir los nombres a las acciones antes citadas y pueden tener una idea de lo que ocurrió, a mí me dieron los siguientes resultados a modo de ejemplo:
- Juan: caminó
- Lili: corrió
- El Capi: bajó su tiempo.
- Elisa: lo subió.
- Don Baccarezza: sacó fotos.
- Yo: acompañé.
Bueno, se va terminando esta crónica interactiva que permite a las personas crear su propia imagen de lo que fue la carrera, a modo de nuevo y arbitrario criterio, el que escribe la crónica define quién será el próximo, entre quienes no hayan redactado aún.
Pablito, acabas de ganar el sorteo, es tu día de suerte, te recomiendo juntar muchas anécdotas en la camioneta de regreso de Trinidad, o en su defecto, juntar mucha fruta como un servidor.
Antes de terminar un saludo a la doña que prendió fuego unas hojitas cuyo humo hizo que el tramo final de la subida a la fortaleza haya sido tan maravilloso, por si no alcanzaba con el repecho y el viento en contra…
Hasta la próxima!
Seba
4 comentarios:
jajaaj muy conmovedoras palabras jejej
Buenísima la crónica!!, tal cual el humo me mató, ja ja
buenísima la crónica Seba!!. Tal cual el humito me mató en el repecho.
Ya me estoy aprontando para la crónica siguiente.
nunca en mi vida corri...........va el bondi alguna vez...pero esta crónica me encanto salud !!!!!!!a ustedes que si lo hacen es porque les gusta.....eva
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